48 horas de música siempre son bienvenidas.
El Holywakamoly Festival tomó por asalto al Foro Independencia e infinidad de etiquetas sonoras fueron presentadas y escuchadas por el público que recibió de inmejorable gana esta propuesta que, parece ser y no está de más cruzar los dedos, se realizará cada año.
Fue un sábado y domingo donde la música hermanó géneros y bandas. Cultura Itinerante se anotó un gran acierto con esta propuesta. No fue extraño ver a Edgardo Íñiguez (uno de los organizadores), estar al pendiente de todos los aspectos más básicos del festival: desde revisar que no faltara bebida o comida para las bandas, así como verificar sonido y horarios estipulados para que cada grupo subiera al escenario en tiempo y forma.
El sábado, la respuesta del público ante Troker, Los Borders, Taco Bambú, La Guíshi Funk, Los Choclok y Futuro Negro, fue de total júbilo. La variedad musical fue justa y tanto Troker como Taco Bambú son favoritos del público tapatío, uno con jazz demoledor y el otro con una propuesta lúdica de cadencia guapachosa estilizada.
El domingo, el flujo de personas dentro del espacio del Foro Independencia fue menor, mas eso no minó los ánimos. Aunque hubo una cancelación que entristeció a varias personas (Les Femmes de Serge no se presentaron debido a un problema de salud de la cantante), el show continuó con energía envolvente.
Por un lado, Fesway demostró que su música a veces oscura pero radiantemente rockera, es apreciada con verdadero ahínco por los tapatíos. The Dirty Black Beans y Los Mata Hipsters provocaron gritos y cadencias a punto del baile. A su vez, Smoke Rings Quartet hizo temblar a los presentes con sus instrumentos de cuerda y potencia sonora, mientras que Ampersan ya son predilectos de nuestra ciudad gracias a ese folk introspectivo y con reminiscencias de música tradicional. Y Radaid cerró con toda la carne puesta sobre el asador y el público le colocó la dinamita al ambiente.
Bien por el Foro Independencia, bien por Cultura Itinerante, bien por todas las bandas y bien por el público que respondió con la mejor de las actitudes.
¡Queremos Holywakamoly para 2016!




























