*Carlos Rivera ofreció la primera de dos fechas en el Palenque de las Fiestas de Octubre superando expectativas y emociones.

Completamente lleno, el Palenque de las Fiestas de Octubre estaba listo para recibir al cantante Carlos Rivera en el primero de sus dos conciertos. La expectativa de los cientos de seguidores que esperaban pacientemente la aparición del exacadémico incrementaba a la par de la impaciencia mientras en el ruedo del palenque los sorteos se extendían en voz de un animador que tuvo que capotear los gritos que exigían la presencia del cantante. Dieron las 0:00 hrs., hora en la que regularmente comienzan las presentaciones, pero la estrella de la noche brillaba por su ausencia.
Media hora después, como una prueba de resistencia a sus fanáticos, Carlos Rivera apareció en medio del Palenque rodeado por sus músicos y acompañado por sus bailarines en frenéticos bailes que arrancaron todos los gritos y algarabía que pueden caber en este recinto.

Con «Lo digo», Amo mi locura», «Bendita tu vida» y «Perdiendo la cabeza/Déjame amarte», Carlos Rivera se ganó las almas de sus admiradores quienes no dejaron de corear fervientemente todos sus éxitos, que se fueron conectando uno a uno con un show íntimo en el que no faltaron momentos memorables como reprender al micrófono por una falla de sonido o entonar «Otras vidas» junto a una festejada con Síndrome de Down que cumplió su sueño de estar cerca de él.
“Regrésame mi corazón»,“100 años», “Recuérdame», “Todavía no te olvido», “Ya no vives en mí» siguieron encendiendo los ánimos de la concurrencia mientras las horas avanzaban plácidamente. Atrás habían quedado el retraso del concierto, el calor y hasta cualquier problema de la vida diaria de sus fans. Carlos Rivera estaba haciéndoles y haciendo su momento con cada tema como “Que lo nuestro se quede nuestro”, “Digan lo que digan», “Solo tú», «Fascinación» y “¿Cómo pagarte?» hasta que la noche llegó a su fin en medio de ovaciones generales y hasta uno que otro piropo que el cantante recibió siempre sonriente.
Texto: Karen de Alba González
Fotos: Luis Gómez Sandi «Lags»







