La diatriba entre lo mexicano y americano a veces resulta recalcitrante. Máxime para un artista mexicano como Oso Parado, que también trabajó en Estados Unidos y se adhirió al estilo de vida del pueblo estadounidense donde la libertad y felicidad son, más que bienes anhelados, deseados.
Ahora, a través de It’s Like Real Life, But Better, el creador originario de Chinconcuac, Morelos, atrae la pupila con una serie de impresiones digitales sobre papel algodón e instalación donde reina el “mix media” y los más disímiles materiales se unen para generar objetos de arte, donde se refleja un incisiva crítica hacia el medio artístico dentro de la Galería Tiro Al Blanco.
Desde hace algún tiempo, Oso Parado ha generado arte apropiándose de imágenes y agregándoles un detalle para volverlas terreno fértil e intervenirlas, a veces con gracia y sutileza y otras más con irreverencia nata. Clásica es su fotografía del rostro de Bill Murray en sepia rosa-avioletado, con un mote de estridencia generado por una gran gota de pintura fosforescente.
Ahora, Oso Parado reinterpreta en It’s Like Real Life, But Better (que, de hecho, es su primera exposición individual en México), un cúmulo de símbolos y destruye la seriedad del arte por medio de páginas arrancadas a catálogos de arte que, decoradas quizá con una silueta desencantada de una modelo de Victoria’s Secret, formen un pasaporte para la denuncia mediática de que los seres humanos tenemos derretidos y diluídos nuestra esencia de individuos. Y es que a cada día, las personas dejan de ser ellas mismas para ser absorvidas por lo mediático y el glamour, en una decantación donde se pierden y extravían infinidad de valores humanos.
It’s Like Real Life, But Better de Oso Parado
Galeria Tiro Al Blanco. Av. Luis Pérez Verdía 21, entre Hidalgo y Morelos.