Texto: DAVID MELÉNDEZ
Del punto exacto donde surge la sorpresa, se incuba también el matiz de lo inolvidable.
Papa Topo, esa suerte de banda ecléctica que carga con flechas de pop lúdico que se disparan hacia lo retro y vodevil, pisó Guadalajara por vez primera y la algarabía fue absoluta. Su directo en el Anexo Independencia tuvo de todo y para todos: cambios de vestuario, atuendos coloridos y ceñidos peligrosamente a los cuerpos de sus cuatro integrantes, covers lustrosos de otras canciones pop que sirven siempre para energetizar la noche con esencia de baila imparable y temas propios ya consagrados que son himnos nocturnos para sonreír de forma trepidante.
Sònia Montoya, Júlia Fandos, Oscar Huerta y el carismático Adrià Arbona, dejaron a todos los asistentes contentos con la rabia de la emoción babeando de sus tímpanos.
Despacharon sin miedo y freno canciones como «Oso panda» (en versión acelerada con los BPM a estampida de taquicardia), «La llamada», «Robot», la veraniega y pegajosa «Lo que me gusta del verano es poder comer helado», «Quédate cerca de mí» y «Mátame», entre otras. Mas también hurgaron entre temas clásicos de otros artistas como «Ese hombre», que hiciera famoso Rocío Jurado (claro, a ritmo sintetizado), la verborraíca «Caca, culo, pedo pis» de Enrique y Ana, al igual que otro de sus temas más hilarantes de este dueto de finales de los años 70’s español, «Súper disco chino». Cerraron con «Yo quiero bailar» del dúo femenino español Sonia y Selena tras un directo avasallador y empáticos por doquier. Y, claro, mención aparte la entrega de Sònia que tritura el bajo de forma celestial, Julia, que ataca la flauta transversal y los coros con enjundia imperecedera y Oscar, que comanda las seis cuerdas con gallardía descomunal.
En lo que respecta a las dos bandas teloneras, los tapatíos pudieron constatar la calidad de los regios de Driver y la de los defeños de Aguilar y Sus Malditos Dandys.
Driver demostró en su primera vez en la Perla Tapatía que son una excelente propuesta de rock disco para destazar seriedades. En su set incluso hicieron un excelente cover muy a su estilo de «Yo no sé si tú te vas» de Juan Gabriel, encaderan dos hitazos disco, «Le freak» de Chic y «Hot stuff» de Donna Summer, mientras que temas propios como «Retrovisión» prueban que hay que mantener un oído atento a esta propuesta sonora originaria de Monterrey.
Por su parte, Aguilar y Sus Malditos Dandys, son una especie de propuesta de funk disco progresiva que dejó también un buen sabor de boca, con sus canciones que son viajes interestelares sonoros que van de las galaxias de la introspección, a las estrellas del baile. Atentos también con su propuesta y no duden en escucharlos.
Así que el primer concierto del 2018 en el Anexo Independencia fue dinamita pura, gracias a Viejos Ridículos que hicieron posible este toquín explosivo.